domingo, 16 de enero de 2022

Ajedrezfraseando...






Ajedrezfraseando
En las llamadas partidas blitz o partidas relámpago (partidas a 5min) los ajedrecistas consiguen otra forma de hacer el juego más entretenido, sobre todo si existe público alrededor, el trebejista comienza a citar sus frases más cotidianas, algunas veces inventadas otras repetidas, con la intención de hacer la partida más jocosa y que si entre los observadores se encuentra alguno que no entiende nada del juego  así se le haga divertida la escena. El ajedrez tiene fama de ser un juego para personas inteligentes, es allí donde se encuentra  quizás la frase más repetida y cotidiana “el ajedrez es un juego aburrido”, recuerdo que cuando inicie la práctica de este juego adopte la costumbre de visitar todas las tardes la casa de mi abuela materna María Dolores Cariño para jugar al ajedrez con un primo y ella al verme llegar decía “ ya van a empezar ustedes a jugar el ajildrez ese” esto nos causaba mucha risa… caminaba hacia la cocina  y pasado unos minutos volvía con 2 tazas de café, pan dulce  y decía “ el ajildrez es el juego de los mudos”  pero el ajedrez también tiene otro rostro, en las partidas rápidas con reloj (5min), el ajedrecista de acuerdo a la posición que se vaya dando en el tablero comienza con sus frases en tono de burla (esto sin faltarse el respeto) convirtiendo las partidas en un ajedrez chacharachero e irónico, son muchas las frases inventadas que me será difícil incluirlas todas en esta crónica sin embargo he seleccionado las mas chistosas y más utilizadas en las tertulias por mis colegas ajedrecistas.
Chácharas del ajedrez y su autor:
Empezaré con una de las mías “cuidado niños no practiquen esto en casa sin la correcta supervisión de un adulto” esto antes de empezar a jugar un gambito de rey “ Marcos Hernández”
¿Quién supiera jugar esto? Muy usada por el amigo Daniel Ramos
Hay que abrir un luchete usada por Ramón Álvarez (Monche) al avanzar un peón g o h para evitar mate de pasillo.
Todo para comerme ese bichito, refiriéndose a un peón (Marco Ramos)
Si quieres tener un enemigo, enséñalo a jugar ajedrez (Edgar Robles)
Te iba a jugar una más dura… pero me confundí (Carlos Muñoz)
¿Quién Patrocina esa pieza? Cuando una pieza queda sin protección
Para atrás como el cangrejo… al expulsar las piezas rivales a su territorio
“Ignoró el dolor” cuando hay una amenaza de jugada muy buena y no la ven
“jugando con mis machetes” o algunas veces “soy experto con mis machetes” refiriéndose a los alfiles (Corona)
“comiendo gallinitas o Chiquitines” cuando comienzan a caer los peones
“comiendo cabezones” (Cristian Ulacio)
“Primero como, después pregunto” cuando nos hacen un sacrificio y no se ve claro como gana el rival
“Vamos a jugar una violencia domestica”  “esto es una carnicería” o “esto se fue en sangre” (José Pérez)
“soy experto en Caballo”  “cuando una pieza no juega, hay que ponerle un lasito” (el amigo tormenta de yaritagua)
“comenzamos a tocar sus partes más intimas” (Francisco Ordoñez+ refiriéndose a atacar las debilidades)
“ni que le pongas patines a ese rey” (cuando un rey persigue a un peón que va a coronar y no lo alcanza)
“el retorno de Mavaking”  siempre que encuentra una jugada de doble filo pronuncia esa frase, su corazón se acelera y ve todas las demás jugadas con claridad. Richard Mavarez
“el que no sabe jugar, mueve un peón cuando se le acaban las ideas”
“Juega tu perolito que yo juego el mío”  antes de iniciar una partida (Luis Batancourt)
“Te gusta comer el pan de a piquito” cuando empiezan a caer los peones (Marcos Hernández)
“debe ser que se fue a Italia a buscar esa jugada” cuando se piensa mucho para mover (Jorge Valera hijo)
“está feo pa` la foto y arrugao pal carnet”  “te salvaras de un chikunguya, pero de esta no te salvas” (Manuel Calderón)
"Que Tal-Lento" (J.J Hernández)
" Que IDEOTA"  no se refiere precisamente a una genial idea...(Francisco Ordoñez)
" Inversion - Ganancia" cuando hay un sacrificio de pieza...
"La Puya en el ojo duele" cuando haces una jugada muy buena al rival...

“a mí no me pregunten yo andaba comprando fósforos” (Wilbert Yánez) “en casa la que lava es María” ó yo no sé de hilo la que cose es María ( Cruz Navea) “ Y lo demás es coser y cantar” (Jorge Valera Padre) esto lo dicen cuando se sienten ganadores. “cuidadito, cuidadito compa Eladio cuidadito, cuidadito…” canto muy usado por el amigo Padilla y que le fue contagiada al amigo José Peña cuando van ganando una partida.
Otras frases de maestros ajedrecistas Nacionales

"El que va a ganar, nunca pierde" Maestro Nacional Elias Paredes
"Me salve por un pelo de Rana Calva"  experto Leonidas Arcila cuando salvaba una partida perdida
" Ese debe ser un caletre que te sabes" MI Daniel Pulvet cuando pierde alguna partida.
" Fischer será Fischer pero una pieza es una pieza"
 “ Ya comí ya me fui” (El gran Aguitas) Carabobo

“cacho no hace dos jugadas buenas y si las hace pierde por tiempo” frase muy usada por Manuel Calderón en nuestras tertulias ajedrecistas.

Se volvió pollo otra frase utilizada por José Peña  cuando su rival comete un error.

 “Estoy jugando muy curraco” “curraco” jugador de poca experiencia (Jugadores de Carabobo)  

“A las debilidades se le dicen Caries” (Maestra Luisa Duran) 

 “El que no entrena se vuelve Curraco” (Luisa Duran) indicando que el entrenamiento constante es importante.

“Perdí con un cacho”(cuando se pierde con un jugador de menos experiencia) Esto dicen los ajedrecistas cuando pierden.

 ‘’Estoy jugando como nunca y perdiendo como siempre” frase muy popular de algunos ajedrecistas.

“Estoy jugando un ajedrez muy mediocre” Marcos Hernández cuando tiene racha perdedora.

“Estamos jugando un ajedrez de cafetín”

“¿Por qué arruinas el momento? “ En una posición táctica y el rival comete el error. ( Richrad Mavares)

Estas y muchas otras frases se han hecho populares en el lenguaje de los ajedrecistas y hacen más divertidas las tertulias, ¿y cuál es tu frase?

domingo, 9 de enero de 2022

El rostro del ajedrecista… Por Marcos Hernández

 

  

 


 El rostro del ajedrecista...

Lo que inició como una jugada traviesa, se convirtió en su jugada maestra, siendo muy joven mostró talento para el ajedrez, disfrutaba sentarse frente a los más fuertes jugadores del deporte ciencia, por sobre todo, los más charlatanes, esos jugadores que hablan  más de lo que juegan, por esto su padre decía “el ajedrez no se juega con la boca”. Esto quedo grabado en su memoria convirtiéndolo así en un jugador silencioso. Jugar a la guerra y derrotar con táctica y estrategia era su genialidad precoz  “me gusta cuando se parte el ego de un hombre”  esto pensaba al ver los rostros  de sus oponentes que con tristeza miraban la  posición de un rey sin defensa. ¿Quién eres?_ Pregunta rutinaria a la que siempre respondía de la misma manera. _ ¿quién soy?  No importa _ ¿de dónde vengo? tampoco, solo puedo decirte que  amo este juego y me auto desterré  de casa por no soportar las presiones de mi padre  cada vez que perdía una partida, ahora soy un errante, voy recorriendo ciudades para mejorar mis técnicas de juego hasta llegar a ser el mejor.  _ ¿y tu familia?  _ Mi familia no sabe donde estoy ni a donde voy, digamos que mi familia  se resume al vagar de mis piezas y un tablero de hule que llevo conmigo en cada uno de mis viajes. Mi padre el rey, mi madre la dama, mis hermanos la torre, el alfil y los peones y mi mascota fiel el caballo…

El joven ajedrecista continuó su camino, llevaba la ruta marcada en un mapa, dentro de la primera página de un libro viejo que cuidaba como una reliquia, el mapa estaba dibujado en una hoja de papel cebolla, la página siguiente  muestra el dibujo de las 64 casillas blancas y negras, creando así la conjugación interesante del tablero, las piezas y su ruta de jugadas.

En sus viajes derrotó a muchos expertos titulados, así  fue el transcurrir de su carrera ajedrecista  de ciudad en ciudad, de país en país, de torneo en torneo, de jaque en jaque, jugando partidas de café, partidas a la ciega, entablando partidas, ganando y perdiendo con cualquiera. En sus viajes y glorias comenzó a ser reconocido entre los grandes, pero él prefería mantener su anonimato, por eso desapareció… dejó de frecuentar los clubes que visitaba, se alejó de los torneos, no se supo más de él.

Sé le hizo muy difícil mantenerse  en el retiro, alejado del tablero y las partidas que se ganan en golpes de táctica o en los finales de reyes, su deseo de jugar era más fuerte que cualquier sentimiento por mantenerse oculto, entonces creó un traje ajedrezado que cubría su rostro y su cuerpo para poder mantenerse en el anonimato,  así salió un día, se dirigió al famoso “Bulevar de los ajedrecistas” donde asisten los más fuertes jugadores del país, allí se sentó en una de las mesas, ubicó sus piezas sobre el tablero y espero que alguien se acercará para retarle. El primer entusiasta en acercarse fue un joven de algunos 10 años, con un muy buen manejo de conceptos, mientras jugaban hizo el intento de dialogar

_ ¿Por qué traes una máscara puesta?  _

Tal vez sea porque aun no juego mi partida más importante, y el día que lo haga no quiero que mi rival sepa quién soy_

 Continuaron jugando y después de varios movimientos el niño se dio cuenta  de que había caído en una celada, extendió su mano y abandonó observando al rival, buscando distinguir el rostro que se oculta bajo la máscara.

Así fueron acercándose diferentes rivales, cada vez con mayor nivel y experiencia, en ocasiones se sentaban frente a él personas con el único conocimiento de mover piezas, solo por el placer de capturar la escena en una fotografía, en menos de un año el jugador anónimo se convirtió en un misterio, algunos le llamaban el ajedrecista sin rostro, el jugador X, el ajedrecista enmascarado, muchas historias se dijo sobre él, se convirtió en noticia principal en portadas de revistas de ajedrez en el mundo, sus partidas y estilo de juego fueron dignas de estudio.

Una vez  sentase ante él un hombre de avanzada edad, al maestro enmascarado pareció inquietarle un poco el retador, iniciaron la partida  con un apretón de manos, el reto sucedió en el parque detrás de la antigua plaza de toros, sin público, ni testigos, eran solo ellos en el parque.

_ ¿De dónde surgió la idea de jugar con un disfraz? Preguntó el hombre que había llegado allí para retarle.

  

  _ Cuando se haya jugado el peón de rey y la dama y los rostros se hayan desdoblado  sabrás entonces por quién doblan las campanas: doblan por ti, esto diría Hemingway.  El hombre sintió en cada jugada como el rostro de su oponente se develaba. _ Hemos llegado a una posición que puede considerarse una especie de tabiya, está es la misma posición que se dio en aquella partida que perdí y que me auto desterró de casa, con esta frase  el viejo entendió porque se doblega el Rey al final de una partida. El jugador anónimo le reveló su identidad sin quitarse la máscara.

 En homenaje al ajedrecista enmascarado…